Es probable que tengas seguro de vida. Sabes que tu familia estará bien en caso de que fallezcas imprevistamente.
¿Pero qué pasaría si quedaras incapacitado? Es muy probable que no tengas suficientes recursos ni seguro para reponer los ingresos perdidos si te encuentras incapacitado para trabajar. La mayoría de los hispanos no tienen en cuenta las consecuencias de la incapacidad a corto o largo plazo.
Si trabajas por tu cuenta, la probabilidad de que tengas suficiente protección por incapacidad es aún más baja. El seguro de incapacidad es costoso, pero necesario, a no ser que tengas los recursos económicos para sobrevivir sin ingresos durante un largo periodo de tiempo.
Evita el impacto financiero preparándote para la posibilidad de una incapacidad:
1. Un fondo de emergencia ofrece protección a corto plazo contra la pérdida de ingresos. Un fondo de emergencia no es sólo para sustituir un refrigerador descompuesto o pagar las facturas tras la pérdida de un empleo. Tu fondo de emergencia puede reemplazar los salarios perdidos por la incapacidad. A menos que tu fondo de emergencia sea abundante, será insuficiente si estás incapacitado a largo plazo.
2. Algunos estados tienen programas de discapacidad. Si tienes la suerte de vivir en Rhode Island, California, Nueva York, Nueva Jersey o Hawai, es posible que ya estés cubierto por la incapacidad a corto plazo.
3. El Seguro Social puede proporcionar asistencia por discapacidad. Sin embargo, la definición de discapacidad no se cumple fácilmente. Tu incapacidad debe durar al menos 12 meses o ser potencialmente mortal. Debes ser incapaz de realizar tu trabajo actual y no poder adaptarte a otro empleo.
– Aproximadamente sólo el 30% de los solicitantes son aprobados. El pago mensual se basa en un porcentaje de tu salario habitual. La cantidad promedio es de unos $1,200 al mes.
4. Tu empleador puede ofrecer un seguro de discapacidad. Los límites de los planes de seguro de discapacidad de grupo suelen ser de hasta el 60% de tu salario o $5,000 al mes, lo que sea menor. Si estás acostumbrado a ir por la vida con un salario de $150,000, es posible que tengas que hacer algunos cambios si alguna vez tienes que utilizar tu seguro de discapacidad.
5. Adquiere tu propia póliza de incapacidad. Adquirir un seguro de invalidez por tu cuenta es costoso, pero hay muchas opciones disponibles. Ten en cuenta que hay un periodo de espera, normalmente de 90 días antes de que la póliza entre en vigencia.
- Presta atención a la definición de “discapacitado”. Puede significar que eres incapaz de trabajar en tu empleo actual. Puede significar que eres incapaz de trabajar en cualquier empleo. El costo de la póliza depende en gran medida de la definición de “discapacitado”.
- El periodo de beneficios puede variar. Puede terminar a cierta edad, o estar vigente sólo durante un número determinado de años.
- El periodo de eliminación es el tiempo que transcurre tras tu discapacidad antes de que la póliza comience a pagar.
- El monto de los beneficios mensuales lo puedes escoger. Puedes necesitar más o menos que otra persona.
- Mientras que el seguro de vida cuesta unos 25 centavos de dólar por cada $1,000 de cobertura, el seguro de discapacidad cuesta unos $20 por cada $1,000 de cobertura. ¡Eso es 80 veces más caro! Sin embargo, si eres menor de 65 años, es mucho más probable que te incapacites durante al menos 90 días antes de que fallezcas.
6. Compensación laboral. Si te lesionas en tu lugar de trabajo y no puedes trabajar, estás cubierto por el seguro de accidentes laborales (Worker’s Compensation). Sin embargo, tienes tres veces más probabilidades de sufrir una lesión fuera del trabajo que limite tu capacidad laboral. Si eso ocurre, no recibirás la indemnización por accidente de trabajo.
Revisa tu situación financiera y decide si estás adecuadamente cubierto en caso de que no puedas trabajar durante un periodo prolongado. Tus ingresos son tu recurso más importante. Es esencial que lo protejas. Para tu seguridad económica, asegúrate de que tú y tu familia tengan ingresos suficientes si no puedes trabajar.